Santa Lucía es un estado insular independiente de 620 km² con una población de 183.630 habitantes (2020, Banco Mundial). Su densidad de población es de 296,18 habitantes por km2. La población tiende a concentrarse en torno a la costa. El interior se caracteriza por su menor población debido a la presencia de densos bosques. La capital de Santa Lucía es Castries, donde vive más del 30% de la población.
La isla volcánica de Santa Lucía es más montañosa que la mayoría de las islas del Caribe. El clima local es tropical, más concretamente un clima de selva tropical, con una estación seca y otra húmeda (que los habitantes llaman también la estación de los huracanes).
Las aguas superficiales son la principal fuente de agua de la isla. Los ríos más importantes para el suministro de agua son Cul de Sac, Canelles, Dennery, Fond, Piaye, Doree, Canaries, Roseau y Marquis. El caudal del río aumenta considerablemente durante la temporada de lluvias, de junio a noviembre, pero el agua potable puede ser intermitente debido a la fuerte sedimentación y a la obstrucción de las entradas de agua.
Agua potable y saneamiento
En Santa Lucía, el tratamiento de las aguas residuales es inadecuado. En la mayoría de las localidades hay una falta de gestión de las aguas residuales. En cuanto al acceso a los servicios de agua y saneamiento en Santa Lucía, el 94% de su población tiene acceso a los servicios de saneamiento. Sin embargo, sólo el 7% de la población está conectada a un sistema de saneamiento colectivo (sólo en los distritos de Castries e Islet), frente a una media del 17% en el Caribe. Así, sólo el 7% de todas las aguas negras domésticas (aguas que contienen excrementos de aplicaciones sanitarias) producidas en Santa Lucía pasan por los sistemas de saneamiento colectivo. La mayoría pasan por las fosas sépticas (más del 80%).
El socio del proyecto CARIBSAN en Santa Lucía es WASCO (St. Lucia Water and Sewerage Company).
